Las metodologías ágiles siempre dan de que hablar. Y más con la proliferación que se ha dado de las mismas. Sin embargo, a pesar de todas las historias de éxito que nos llegan por los diferentes medios, parece que siguen siendo lugares paradisiacos donde trabajan de esta manera.
¿Cuanta gente trabaja hoy en día con una metodología ágil? Que levanten la mano.
Hace tres o cuatro años trabajaba de manera ágil. A la hora de la salida, invariablemente el director llamaba a una reunión donde se exponía un problema que sin dudarlo era resuelto con una mini-aplicación cuya primera revisión era a las 9.00 del día siguiente, sin importar la hora a la que terminara la reunión en curso. Creo que el intervalo más pequeño fueron 6 horas.
No es que fueras a desarrollar ERP's o nóminas o algún tablero de control (bueno, este último sí), generalmente fueron aplicaciones muy específicas de usar y tirar. Pero, después de la primera revisión, seguían varias hasta que terminaba el ciclo de vida de la aplicación, días o semanas y seguíamos con una nueva.
Eso es ágil. O al menos así lo veo ahora :D
Hoy encontré a Steve Yegge y un post harto, harto, harto interesante al respecto de las metodologías ágiles. Les pega y les pega duro sacando a colación la cultura organizacional y laboral de Google. Si bien él tiene la oportunidad de trabajar en una organización dedicada al desarrollo de software, no a todos nos ha llegado esa oportunidad.
Léanlo, coméntenlo, compártanlo.
Finito.
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